jueves, 27 de enero de 2011

MODAS PORTEÑAS: PERROS

Los porteños somos típicos animales de costumbres, ya sea por comodidad, o por no ser menos que el vecino, siempre encontramos el ingenio para copiar, y/o superar al prójimo. La originalidad no es lo nuestro.

Te fijaste como han desaparecido algunas razas de las plazas y los paseos matutinos? Por ejemplo, hace muchos años, casi todo el mundo, en especial las mujeres solas, tenían un Pequinés. Donde cornos fueron a parar los descendientes de aquellos espantosos cuadrúpedos de hocico mocho, chuecos y carácter de mierda, que inundaban la ciudad?

En los 80 comenzaban a aparecer las razas “exóticas” y pululaban los criaderos con nombre raros donde para comprar un ejemplar debías hipotecar tu casa. Aca se hacen notorias las preferencias:

*Los amantes de las razas pequeñas: se inclinaban por los ShiatZu, similar al Pequinés pero menos feo, con la posibilidad, hasta ese entonces desconocida, de colocar ridículos moños en el mechón sobre los ojos, los Yorkshire que conquistaron los corazones de los que padecen de complejo de peluquero, con su pelo lacio de color matizado, se los veía pasearse con importantes peinados y, obviamente, el ridículo moño en la cabeza. Para los que, si no tienen un perro bajo el brazo no son felices: los Malteses con mas pelo que perro, solo para personas con mucho tiempo libre para mantener semejante pelambre. Y quien no soñó con tener un Basset Hound, con sus enormes orejas (el viejo y conocido “batata”).

*Los amantes de las razas grandes: cambiaron el feroz Doberman por el brutalmente diabólico Rottweiler (luego de la peli “La Profecía”), bastante complicado de adiestrar y con un carácter mas que jodido, a parte de calzar una mandíbula, que mejor no saber cuantos dientes tiene. Hoy, generalmente se los ve gordos, viejos y fofos. Para las familias numerosas que mejor que un Viejo Pastor Ingles, era como tener un peluche viviente en casa, a los que también se los ridiculizaba no solo con, los ya mencionados, moños , sino que se los solía ver en verano, con el cuerpo rapado, dejando la melena en la cabeza, ¡pobre perro!, el Setter Irlandes, con su característico trote, el Gran Danes (muy grande, pero muy tonto), también fueron desapareciendo, como tantas otras que desechamos simplemente por que pasaron de moda.

En los noventa, el ágil Braco de Weimaraner paseaba magníficamente suelto, sin perder de vista a su amo, con una elegancia digna de admirar, los Bretones, inquietos e incansables correteando y molestando a todos en las plazas, también fue la década dorada del Beagle, con su afinado ladrido y andar de “juguete a cuerda”, olfateando todo lo que encontraba a su paso. Y llegó el turno de los sufridos Siberian Husky, y Akita Inu, soportando estoicamente los terribles calores de verano, hasta se llegó a ver algunos San Bernardo, hoy casi desaparecidos, reemplazado actualmente, por la "moda" del Terranova, mas ágil y con cara de "bonachón". Todos de zonas muy frías, adaptándose a sensaciones térmicas tropicales... pobres bichos!!.

Estas razas, también se ven poco, hoy en día si querés un perro grande y “estar a la moda”: la tendencia es: un Golden Retriever o Labrador Retriever, este último, si es color arena o chocolate mejor, (el negro no esta de moda!), y si querés uno chico, para hacerle “upita” nada mejor que un Caniche Toy o un Bichon Frise, que ni siquiera pierden pelo, con posibilidades casi infinitas de cortes y peinados (usados para diferenciarlos entre si, ya que casi, son considerados plaga, de tantos que hay).

Aunque debo reconocer que siempre hay excepciones a las reglas y algunos se distinguen a la hora de elegir la raza de su mejor amigo y he visto Bull Terrier con raro su hocico, bull dog frances (igual que el ingles pero con lifting), el simpático Pug con sus enormes ojos saltones como dos ciruelas, el White Terrier con su carita de foto de almanaque, entre otros.

Muchos son los canes que han pasado al cajón del olvido de los porteños, la moda impone cambios tan drásticos, como hacer desaparecer una raza de la vida cotidiana, e imponer otras, que tal vez no son las apropiadas para estos climas y geografías. A veces sucede que se vende un ejemplar que no es el indicado, solo por estar de “Moda”. Mucha gente desconoce que los canes están biológicamente diseñados para cumplir una función, adquiriendo un perro sin saber diferenciar “ataque y defensa” de “compañía faldero”.

Pero he descubierto que, la moda canina sigue los conceptos de la moda universal, el famoso “todo vuelve” o como se dice ahora: "vintage", y ya se puede ver algunos simpáticos Dachshund Teckel, mas conocido como “perritos salchichas”, que hicieron furor allá por los '70. Quien no te dice, que dentro de unos años, veamos la ciudad inundada de Pequineses, otra vez.


sábado, 22 de enero de 2011

FUERZA CRIS

Para mi enero siempre es una síntesis de lo que será el resto del año, algo así como los avances de una peli en el cine, te muestra un poquito de todo lo que vas a vivir, mezclando un sin fin de emociones: la loca alegría por empezar de nuevo, la ansiedad por partir, llegar al lugar de vacaciones y disfrutar el merecido descanso, la congoja de ver que los hijos deciden disfrutar de esas vacaciones con amigos, eligiendo el ultimo rincón del mapa, alguna que otra desilusión por que un amigo se vuelve esquivo y no dice que le molesta, y llorar la partida de los que no regresarán.

Y con esta última oración me quedo, por que la noticia me shockeo. El que partió fue el papá de la amiga de una de mis hijas. Sin previo aviso su corazón dejo de latir, dejando a Cris, su esposa, con un manojo de ilusiones y esperanzas que se desvaneció de sus manos.

Repetía una y otra vez “me quedé sin el amor de mi vida”, fueron cuarenta años juntos, cuarenta años sin peleas, cuarenta años enamorados uno del otro. Fue la primera vez en mi vida que pude escuchar esta frase, dicha con un sentimiento nacido en lo profundo del corazón, y eso me entristeció mas aún.

Hoy, Cris deambula por una casa demasiado grande, demasiado silenciosa, tratando de ver como sigue su vida, que quedo como piezas de rompecabezas desparramadas. Todas le decimos: tiempo al tiempo, paso a paso, y al igual que se le enseña a un pequeño a dar los primeros pasos, Cris debe aprender a caminar, de nuevo sola, será difícil, habrá tropiezos, pero para eso está la familia y los amigos que ayudaremos a incorporarla una y otra vez, hasta que el paso sea firme y seguro.

Fuerza Cris!

domingo, 16 de enero de 2011

UN LARGO SUEÑO

Mi hija mayor cumplió un sueño que comenzó hace cuatro años en una charla entre amigas, con esa imaginación propia de adolescentes, planearon un viaje a las altas tierras del norte, con cerros bañados de insólitos colores y saborcito a chicha.

Pero faltaba edad para tener permiso en tamaña travesía, recorriendo pueblos de callecitas angostas y casas bajas cargadas de historias, que incluía La Quiaca, Yavi, Abra Pampa, Huamhuaca, Tilcara, Purmamarca, y cuanto pueblito apareciera en la ruta elegida.

Luego de cuatro años de espera y miles de planes archivados en su mentes, dos de aquel grupo de amigas que comenzó con aquella loca idea y otra mas que se acoplo años mas tarde, juntaron peso a peso y todo fue tomando forma de realidad. A medida que el tiempo pasaba ya parecía imposible un retroceso, y todo se acelero cuando en noviembre compraron sus pasajes, para partir a mediados de enero.

En estos meses hubo de todo, planes, cambios de rutas, discusiones, risas, pero por sobre todo esa gratificación que se siente proponerte algo y lograrlo, con todas esas hermosas sensaciones que producen las ilusiones concretadas.

Como madre me preocupaba la distancia que me separaría de mi pedacito de corazón, convertida hoy en una joven mujer, que dormirá en carpa, con mucha lluvia, mucho barro, que no podré controlar si se alimenta bien, si se abriga, si se protege del sol, bueno eso que las madres sentimos, aun sabiendo que los hij@s se las saben arreglar muy bien solos. Pero hice “tripa corazón” y en vez de lamentar decidí colaborar, aportando ideas, recorridos, juntando pesitos para “colaborar” con el proyecto, y como era de esperar en mi, preparar una caja con alimentos no perecederos, por las dudas. 

Pero el broche de oro se lo llevo mi hermana, a quien le encanta organizar viajes, busco información de que llevar, como llevar, que hacer, como hacerlo y que no. Armo su mochila para que el peso fuese equilibrado, guardo todo en bolsitas con cierres herméticos, actuando con tanta habilidad como si fuese una mochilera experta, y que a su sobrina no le faltara nada.

Hoy, sin anestesia para mi, la pichona partió junto a sus amigas, su felicidad menguo mi angustia, con su mochila enorme, cargada con un poco de todo, mucha ansiedad, muchísima alegría, pero sobre todo con la emoción de cumplir un sueño!!

sábado, 1 de enero de 2011

PRIMERO DE ENERO

Las fiestas pasaron, dejando una estela de emociones flotando en el aire, con las mejores expectativas del año que se inicia, enero pinta dulce y tranquilo en una ciudad que parece haberse calmado luego de la alocada carrera por llegar, lo mejor posible, al final del año que ya se fue.

Hoy, primer día del 2011, cuando la mitad de la gente duerme, y la otra mitad busca combustible en alguna estación de servicio, para emprender su viaje al ocio, puedo volver a escuchar el silencio maravilloso de mi patio en el medio de la manzana y el calmado canto de los pájaros anunciando un día cálido y perezoso. Ya pasó el ensordecedor bombardeo multicolor al que estamos acostumbrados para despedir el año viejo, algunos apurados por que se vaya de una vez por todas, otros festejando lo que les dejo.

Y el círculo se completó para iniciarse de nuevo. La gran duda es: como logramos superar el cansancio de diciembre, para comenzar enero lleno de energías? es un misterio sin resolver. Pienso que es, como cuando estrenás un vestido nuevo, con ese olorcito tan característico de lo “no usado”, impecable.

Ahora que todo ya paso nos quedo un poco de desorden en la casa, una heladera llena de comida “que sobró”, alguna que otra botella de vino espumante, que seguramente será guardada para festejar algún acontecimiento notorio del año, una resaca importante por haber sido desmedidos y, en una noche, comer y beber las mismas calorías que en otra época del año nos hubiese llevado mas de una semana sumar. Sentís que todo tu aparato digestivo gira como carrusel, y en tu cabeza retumban los mas leves sonidos como si fueran bombas de estruendo, pero con la excusa de que es una vez al año, te lo bancas estoicamente, por que estas contenta, y manifestas esa alegría inexplicable de haber puesto el contador, nuevamente, en cero. Por que tenes esa maravillosa sensación que estas de estreno.

Bienvenido 2011, te recibimos con los brazos abiertos, para que nos sorprendas, con tus 365 dias flamantes, llenos de “perfumito a nuevo”.